- Diputados alemanes aprobaron paquete de más de 20.000 millones de euros para sus Fuerzas Armadas en el marco del rearme tras la invasión rusa de Ucrania. El plan incluye la compra de submarinos, fragatas y misiles.
Berlín, Alemania.- La Comisión Presupuestaria del Bundestag (la cámara baja del Parlamento alemán) aprobó nuevas adquisiciones para las Fuerzas Armadas alemanas por valor de aproximadamente 20.000 millones de euros.
Entre las adquisiciones, se incluyen cuatro submarinos para la Marina de tipo U212 CD que costarán 4.700 millones de euros y serán encargados a Thyssenkrup de forma conjunta con Noruega, así como fragatas y misiles teledirigidos.
El Ejército de Tierra recibirá lanzacohetes múltiples PULS y se impulsará su digitalización, entre otros, mientras que en el ámbito aéreo se adquirirán misiles para sistemas antiaéreos PATRIOT y se modernizarán sistemas IRIS-T para alargar su vida útil, según informó el Ministerio de Defensa.
Todo ello tendrá un coste estimado de 20.000 millones de euros, de los que 7.000 procederán del fondo extraordinario para modernizar las Fuerzas Armadas alemanas de 100.000 millones de euros creado por el Gobierno a raíz de la invasión rusa de Ucrania.
En total, la Comisión del Bundestag aprobó 38 proyectos. Se trata “de la cifra más alta jamás alcanzada”, dijo el Ministro de Defensa de Alemania, Boris Pistorius, agradeciendo a los diputados socialdemócratas, conservadores, verdes y liberales que votaron a favor, renunciando a convertir el asunto en un tema de campaña electoral, ya que para todos ellos estuvo claro que se trata “de la seguridad del país”, aseveró Pistorius.
Rusia está en el tercer año de guerra y además ataca a Europa utilizando métodos híbridos, señaló Pistorius en una comparecencia en la que recalcó que hace falta estar preparados “para poder garantizar la seguridad pese a la agresión de (el Presidente ruso, Vladímir) Putin”.
Boris Pistorius justificó que esto es necesario dada la situación de amenaza por parte de Rusia, que no existe solamente por tierra, ya que también está presente el riesgo de ser “cercados o rodeados” bajo el agua.